
Escribe Paco Mira:
EL PESO DE LA
LEY, EL PERDÓN
El peso de la ley debe caer con toda su fuerza y rigor sobre
una mujer sorprendida en adulterio. Porque, claro, la ley está para cumplirla,
repetimos a menudo, sin pensar demasiado para nada en lo que decimos y la ley
de Moisés manda apedrear a las prostitutas. No hay escapatoria posible, es
evidente: hay que apedrearla, ejecutando la sentencia que la ley dicta. Y no
puede haber perdón,...